15 abril 2008
El 15% de los españoles dicen que en su trabajo se sigue fumando
El 15 por ciento de los españoles dice que en
su trabajo sigue expuesto al humo de tabaco, según datos del Comité
Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), que recuerda también
que la última Encuesta Nacional de Salud revela que el 40 por ciento de
los ciudadanos afirma exponerse al humo de los cigarrillos en los
lugares de ocio
Por este motivo, el CNPT exige en un comunicado
«que se lleven a cabo controles al respecto en lugares públicos
cerrados» entre los que figuran los bares y restaurantes de menos de
100 metros cuadrados, donde según la Ley del Tabaco, en vigor desde
enero de 2006, se puede fumar siempre que el propietario así lo decida
y advierta oportunamente a los clientes.
El
criterio del comité es que la medición y difusión de la calidad de aire
en lugares públicos cerrados sería una medida útil para aumentar el
porcentaje de ciudadanos no advertidos sobre los riesgos de exponerse
al tabaco.
A este respecto, el CNPT
propone que las administraciones autonómicas utilicen los estándares
internacionales de calidad de aire, que fijan que la concentración de
partículas finas no debe exceder de 15 microgramos por metro cúbico de
media. Y es que el Comité antitabaco
asegura estar alarmado por que la contaminación en los locales de ocio
sea, según sus propios estudios, unas veinte veces mayor, como
promedio, que la observada en la calle.
Una
de las peticiones que hizo esta organización a los políticos en la
pasada campaña electoral consistió, precisamente, en que se modifique
la ley para que incluya como libres de humo a todos los locales
públicos sin excepción. No obstante, entre las prioridades del citado
comité está también la de que se cumpla la actual normativa, «sobre la
que hay indicios de que no se observa con el rigor debido», ya que el
15 por ciento de los españoles dice estar expuesto al humo del tabaco
en su trabajo, sostiene el comité.
En
esta línea, el CNPT recuerda que alrededor de 800.000 trabajadores de
la hostelería inhalan cancerígenos del humo del tabaco equivalentes a
tres cigarrillos diarios como promedio, una cifra que se eleva a 16 en
el caso del personal de pubs, discotecas y otros locales de ocio
nocturnos.