11 diciembre 2008
Inglaterra y Gales prohíben a las tiendas tener el tabaco a la vista

Escondido debajo del mostrador. Así se venderá el tabaco en Inglaterra
y Gales. El Gobierno británico anunció ayer una nueva legislación que
impedirá colocar las cajetillas de cigarrillos en las vitrinas y
estantes de los comercios, a la vista del público. También quedará
prohibida cualquier publicad sobre el tabaco en los establecimientos de
venta


La medida pretende reducir el número de fumadores entre los
adolescentes británicos y evitar que enciendan el primer cigarrillo.
«Va dirigida principalmente a los chicos de 11 a 15 años. La publicidad
ya se ha eliminado de la televisión, de las películas y de los diarios.
Solo queda en los comercios donde se despacha tabaco», señaló el
ministro de Sanidad, Alan Johnson. «El tentador y multicolor despliegue
de tabaco en los quioscos anima a la gente joven a empezar a fumar.
Debemos acabar con esto», subrayó Johnson, para quien el tabaco
constituye «el mayor riesgo para la salud pública».

El Gobierno está estudiando además la prohibición de las máquinas
expendedoras de cigarrillos, pero por ahora se ha limitado a tomar
medidas para que los menores de 18 años no puedan adquirirlos de esta
forma. Las máquinas podrían funcionar con unas fichas que solo se
venderían a los adultos. La Fundación Británica del Corazón ha
lamentado que el Ejecutivo no haya eliminado las distribuidoras
automáticas. Uno de cada cinco menores obtiene el tabaco por esta vía.

La nueva reglamentación empezará a aplicarse en los supermercados y
las grandes superficies a partir del 2011 y, dos años más tarde, en las
tiendas pequeñas. Escocia e Irlanda del Norte podrían seguir el ejemplo
inglés. Prohibiciones similares en otros países, como Islandia, han
ayudado, según el Gobierno, a reducir en un 10% el hábito de fumar
entre los jóvenes.

En plena crisis económica, la medida ha sido muy mal recibida por
la Asociación de Fabricantes de Tabaco. «No es un buen momento para
golpear a los pequeños comerciantes con medidas como estas», señaló su
portavoz, Chris Ogden. El Reino Unido ya ha prohibido fumar en todos
los locales públicos y ha elevado de 16 a 18 años la edad legal para
consumir tabaco.